Es sabido que la popularización de los autos eléctricos ha representado un cambio absoluto para la industria automotriz, algo que no solo vemos reflejado en cuestiones energéticas sino también en los procesos de fabricación de vehículos de hoy en día, lo que ha llevado a los productores a, incluso, modificar sus instalaciones.
Este cambio no sólo ha puesto el foco en las cuestiones mecánicas, sino también en el diseño de automóviles y en las tecnologías y la digitalización aplicada a los mismos. Dichas tecnologías incluyen hoy al Head-Up Display, una nueva funcionalidad que muchas marcas de vehículos han comenzado a adoptar para marcar una diferencia competitiva.
¿Qué es un Head Up Display?
Entendemos por Head Up Display o HUD al sistema novedoso que permite proyectar información sobre la parte inferior del parabrisas del automóvil, algo que permite conducir sin desviar la mirada del camino ni distraer al conductor. Este sistema fue pensado para automóviles con el fin de mejorar la seguridad en calles y rutas, ya que además de indicar la velocidad de circulación, brinda datos importantes como el voltaje de la batería o el estado de la ruta y del tráfico, la advertencia de peatones o animales en zonas con escasa visibilidad e, incluso, una alarma que se activa cuando excedemos los límites permitidos.
La tecnología Head-Up Display fue utilizada por primera vez en los aviones de combate posteriores a la II Guerra Mundial y surge como la imitación de un recurso que tenían los bombarderos Havilland Mosquito de la Real Fuerza Aérea Británica. En esas aeronaves un cristal permitía que se reflejen los datos del radar y una representación virtual del horizonte, generada a través de los datos del instrumental de navegación. Para su incorporación a los automóviles debemos remontarnos recién al año 1965 donde aparece el primer prototipo que montó un Head-Up. Este fue el Chevrolet Corvette Mako Shark II. Sin embargo, deberían pasar 23 años años más para que, en 1988, la marca Oldsmobile incluyera un velocímetro digital en la producción y venta de un coche.
Actualmente existen dos tipos de proyección de la información con estos dispositivos: el más simple es el de un proyector convencional y su función es enviar la información digital, que también está a disposición del conductor en su cuadro principal, con una proyección invertida que, al reflejarse en el cristal, pueda ser leída tal como en la pantalla. El otro modo es proyectando esa misma información en un cristal transparente que nace desde la cubierta superior del tablero, que interpone un elemento entre los ojos del conductor y el parabrisas.
Ya son varias las marcas premium de vehículos como Audi, BMW o Mercedes que ofrecen esta tecnología en sus nuevos modelos, pero no son las únicas. Otras marcas más tradicionales también están comenzando a implementar este tipo de sistema para la fabricación de próximos automóviles. Actualmente, se está trabajando en un sistema de HUD basado en proyecciones holográficas 3D, un proyecto sumamente prometedor en el que varias compañías ya han decidido comenzar a invertir y del que hablaremos muy pronto.
Si bien son muchos quienes afirman que estas nuevas funciones son prácticas y cómodas para un automóvil de uso cotidiano, hay quienes consideran que esta “sobrecarga de información” podría tener un efecto contraproducente en los conductores, lo que provocaría mayor distracción al momento de encontrarse frente al volante. Lo cierto es que el sistema HUD ha llegado para quedarse y más tarde que pronto, comenzaremos a verlo con mayor frecuencia en lo cotidiano.